Hasta la fecha la Seremi de Salud en la Provincia de Chiloé ya lleva 47 fiscalizaciones a locales de venta de carnes y se espera alcanzar más de 100 inspecciones sólo durante este periodo.  

Un recorrido por las principales carnicerías de la comuna de Castro, encabezaron representantes de la Gobernación Provincial de Chiloé, la Seremi de Salud, el Servicio Agrícola y Ganadero (SAG), Carabineros  y la PDI, con el objetivo de verificar la inocuidad de los productos y así prevenir enfermedades transmitidas por los alimentos.

Las acciones son parte del Plan de Fiestas Patrias que intensifica las fiscalizaciones a lugares donde se expenden carnes para asegurar la calidad y el cumplimiento de la normativa vigente enmarcada en el reglamento sanitario de los alimentos.

En la oportunidad, el Gobernador Provincial de Chiloé, Fernando Bórquez explicó que se trata de un plan para “concientizar a la comunidad de que en estas fiestas patrias pueda comprar productos en lugares habilitados y que a veces lo más barato le puede traer repercusiones negativas. En ese sentido, siempre deben fijarse en el periodo de vencimiento de las carnes que consumen, que estén refrigeradas, que no es legal comprar en lugares clandestinos y es por ello que estamos fiscalizando algunos locales”, comentó.

EL Gobernador reconoció que son más de 100 las fiscalizaciones que debería hacer la Autoridad Sanitaria durante este periodo y destacó las acciones que el SAG está encabezando  junto a Carabineros, la PDI y otros servicios.

En tanto, el Jefe de la Oficina Provincial de la Seremi de Salud, Cristian Araneda, informó que el objetivo es velar por la salud pública, “y en ese marco es que realizamos fiscalizaciones a carnicerías, fábricas de empanadas y fiestas costumbristas. En este periodo ya llevamos 47 carnicerías inspeccionadas y con eso podemos asegurar a la población que los productos cumplen con las medidas requeridas y la seguridad para su consumo”, indicó.

El llamado que hizo el representante de la Autoridad Sanitaria es al autocuidado en la población, “específicamente a separar los alimentos crudos y los cocidos con las carnes y así eliminar los niveles de riesgo que podría tener una contaminación cruzada. Lo otro es comprar en locales establecidos donde uno puede asegurar que los productos tengan su inspección médico veterinaria correspondiente y así evitar problemas como triquinosis y enfermedades parasitarias”, confirmó.